Los
arqueólogos vuelven a Venta Micena para trazar la historia del hombre de Orce.
eldiario.es Miguel
Gómez16/08/2013
El profesor Robert
Sala dirige los trabajos en la localidad granadina, que regresan al lugar donde
se halló al 'Hombre de Orce'.
Los investigadores
piden "olvidar las viejas polémicas" y trabajar para que el
yacimiento tenga "el prestigio que merece".
El diente del llamado
'Niño de Orce' ha acabado con las dudas sobre la antigüedad de los
asentamientos humanos en la zona.
Este agosto, los investigadores regresan a los yacimientos de Orce, en
Granada, intentando huir de las polémicas que han perseguido al 'Hombre de
Orce' desde los primeros trabajos reglados, hace ya más de 30 años. El
arqueólogo Robert Sala encabezará un equipo que por primera vez trabaja con la
tranquilidad de saber que la existencia de seres humanos hace más de un millón
de años en la zona está más que demostrada gracias al diente del llamado 'Niño
de Orce', reconocido tan recientemente como este pasado mayo.
Sala dirigirá los trabajos entre el sábado 17 de agosto –aunque las
excavaciones en sí comienzan a partir del 19– y el 15 de septiembre, contando
con 45 investigadores especialistas en diferentes disciplinas, para analizar
los yacimientos del Barranco del León –donde se encontró el diente–, Fuente
Nueva 3 y Venta Micena –donde José Gibert hallase el polémico cráneo del
'Hombre de Orce'–. Más de 1400 fósiles ya han sido rescatados en anteriores
campañas, aunque ahora no se trata tanto de buscar más rastros de vida humana,
que ya nadie discute, como de identificar las condiciones naturales anteriores
a la llegada de nuestros antepasados a la zona.
Los yacimientos arqueológicos de Orce, en Granada, es posible que sean los
más importantes de España, al nivel de Atapuerca. Hace apenas tres meses, se
reconocía que un diente de leche encontrado en el Barranco del León, datado en
aproximadamente 1,4 millones de años, era el resto humano fósil más antiguo de
Europa, y confirmaba la existencia del siempre polémica ‘hombre de Orce’. Sin
embargo, esta importancia científica e histórica sigue estando empañada por las
continuas disputas tanto académicas como políticas en torno a ella.
El pasado viernes 10 de mayo, la revista Journal of Human Evolution volvía
a publicar el artículo de los arqueólogos Isidro Toro, Bienvenido Martínez,
Jorgi Agustí y Robert Sala, que confirmaba, tras la pertinente revisión por
pares, que el diente de leche descubierto en 2002 era la primera prueba fósil
de la existencia de restos humanos en Orce. La prestigiosa publicación había
'suspendido' la publicación hasta que incluyesen menciones al trabajo del
investigador catalán ya fallecido José Gibert, una medida que se tomó por las
quejas de Luis, el hijo de este, ante la "ignorancia deliberada" de
los hallazgos de su padre.
Rivalidad entre investigadores
La disputa entre Gibert hijo y los arqueólogos se mueve entre lo académico
y lo personal. Luis Gibert es geólogo y su especialidad impide que se le
permita excavar en los yacimientos que descubriera su padre, pero Martínez,
Agustí y Toro fueron colaboradores cercanos de este, los dos primeros siendo
sus ayudantes y el tercero codirector junto a él de varias excavaciones desde
1982. La separación entre unos y otros viene a raíz del famoso y polémico
cráneo del 'Hombre de Orce', una fósil atribuido a Gibert que fue desacreditado
como resto humano, atribuyéndose finalmente a un animal.
La corrección del artículo de Journal of Human Evolution obedece
a reconocer que varias de las piezas de industria lítica que se incluyen en el
mismo fueron publicadas ya en 1999 en un artículo de Gibert y a mencionar el
precedente del diente del 'niño de Orce', un trozo de esmalte atribuido
finalmente a un hipopótamo y que también halló el catalán.
Sobre el diente, finalmente, no hay dudas toda vez que acredita su
humanidad el mayor experto en este terreno, reconocido por igual por Gibert
hijo y los actuales directores de la excavación: José María Bermúdez de Castro.
La datación se deja en un arco de entre 1,1 y 1,7 millones de años que las
pruebas estratigráficas afinan a 1,4. Y aún así, ha costado 10 años desde el
hallazgo y varios meses de acusaciones cruzadas que la comunidad científica
internacional pueda aceptarlo sin reservas.
¿Inversión insegura?
Por otro lado, el alcalde de Orce, José Ramón Martínez (IU), no ha dejado
de criticar lo que considera "la escasa inversión de la Junta y la falta
de apuesta por Orce". Desde la Consejería de Cultura responde que los
yacimientos del Barranco del León –donde fue hallado el diente– y Fuente Nueva
3 van a recibir 300.000 euros de inversión para próximas excavaciones,
dirigidas por el profesor Robert Sala, siendo el único espacio en Andalucía que
subvencionará la Junta de Andalucía en el actual contexto económico.
De hecho, fuentes de la Consejería de Cultura detallan como la Junta ha
financiado la adquisición de Fuente Nueva 1 y 3 y del Barranco del León –que
cedió en propiedad al Ayuntamiento de Orce–, además de mantener en alquiler
vitalicio Venta Micena. También adquirió y restauró el Hospicio de Orce como
residencia de investigadores, financió el Centro de Interpretación y ha seguido
excavando de manera constante desde 1999, con una media de 60.000 euros por
campaña.
Por su parte y finalmente, Isidro Toro, como director del Museo
Arqueológico de Granada, pide a todas las partes "dejar el pasado y mirar
al futuro". Los investigadores que trabajan actualmente "quieren que
Orce tenga la importancia que merece, pero la comunidad científica
internacional lo mira con desconfianza por estas peleas. ¿A qué no sabemos de
discusiones en Atapuerca? Pues esa es la comparación".
No hay comentarios:
Publicar un comentario